Me remito a una de las definiciones de política según la Real Academia Española para justificar en mi blog la creación del tema o categoría Reflexiones políticas: “Actividad del ciudadano cuando interviene en los asuntos públicos con su opinión, con su voto, o de cualquier otro modo”.
Gracias a nuestro sistema democrático en Colombia, vengo ejerciendo mi derecho al voto desde que tuve la edad para hacerlo. Pero creo que eso no basta. Creo que hace falta además, no sólo como un derecho sino como un deber, al igual que el voto, participar activamente de alguna manera en la construcción y mejoramiento de nuestra sociedad.
Los buenos o malos gobernantes, las buenas o malas políticas públicas son producto necesariamente de nuestra acción o de nuestra omisión. Claro está, eso sí, que lo de “bueno” o “malo” es relativo, pues aún estamos lejos de contar con un sistema perfecto, en donde las decisiones beneficien a todos por igual. En el entretanto, habrán decisiones que beneficien a unos pero perjudiquen a otros y supongo que un “buen” gobernante y unas “buenas” políticas públicas, podrán obtener ese calificativo cuando sus decisiones y alcances beneficien el interés general, a una amplia mayoría, y cuando prime el interés superior de la sociedad sobre los interes y egos de unos pocos particulares.
Es esta la razón de este espacio: contribuir cuando menos con reflexiones, con opiniones y con el enriquecimiento del debate gracias a los comentarios que generen los mensajes aquí publicados. Y como dijo John F. Kennedy, “no te preguntes qué es lo que tu país puede hacer por tí, pregúntate qué puedes hacer tú por tu país”.
Me parecen realmente reflexionadas tu palabras, Jamie. Pero creo que en lo que al “sistema perfecto” se refiere, políticamente hablando es un término “utópico”. Los gobernantes deciden hacia un lado o hacia otro, no pensando que perjudican a unos, si no que benefician egoístamente a los suyos, sin detenerse un minuto a reflexionar sobre las consecuencias generadas por su decisión.
Vivo en Madrid, España y aunque gozo de un sistema “democrático” si se le puede llamar así, cada año que pasa creo menos en los políticos, que no en la política. Creo que en muchas ocasiones deberíamos de ser los ciudadanos quienes tomen decisiones de cierta relevancia, esta claro que aunque depositemos la confianza en nuestros políticos, no se merecen el derecho a decidir por nosotros.
Una vez más valoro tus reflexivos pensamientos.
Un saludo.
Gracias por tus comentarios, Iñigo.
Saludos!
Pero hablemos de como vamos a acabar con las farc y los paras!
Hola Carlos,
Gracias por dejar tu comentario. Tu nombre se me hace conocido, pero estoy dándole cabeza desde hace rato y no logro resolverlo. 🙂
Con respecto a tu comentario, con el reciente escándalo de la “parapolítica”, que aún no termina, y con lo que se viene de la “farcopolítica”, creo que se requiere un gran acuerdo nacional, que incluya a los partidos del gobierno y de la oposición, para ponernos de acuerdo en unos mínimos simples, como el respeto a los derechos humanos. En mi opinión, la mejor forma de combatir a las fuerzas irregulares es con más inversión social y con más espacios de diálogo y de participar, siempre que se cumplan esos mínimos simples de convivencia y respeto.
Saludos!