Mi primer blog

Sí, por supuesto este es mi primer blog, pero no es a esto a lo que voy a referirme en este artículo, sino al primer blog que conocí y visito con frecuencia, y que además se trata del primer blog del que además conozco personalmente a su bella autora. Es el blog de Ewa Kulak, polaca de nacimiento y de crianza, pero en mi opinión, latina de corazón y colombiana por adopción afectuosa.

Desde mi condición de colombiano, lo que hace tan particularmente atractivo su blog es la gran cantidad de artículos que ha escrito sobre Colombia, sobre nuestras costumbres, sobre nuestros lugares y sobre algunos de nuestros personajes. Y resulta muy simpático y hasta refrescante leer esos artículos escritos desde la óptica de alguien que viene de afuera y que cuenta con unos criterios y características inmejorables, en varios sentidos, por su brillante formación académica, por haber vivido en varios países y por haber experimentado al menos dos sistemas económicos, el comunista y el capitalista. Creo que todos esos elementos se conjugan para darle más locuacidad a sus escritos.

Claro, se trata de sus vivencias y de sus opiniones personales, de sus percepciones, que a veces no son compartidas por muchos y que pueden llegar a generar inconformidades o polémica. De hecho, varias de las opiniones expresadas en algunos de sus artículos yo no las comparto, ni diría tampoco que todo lo que ella expresa es una verdad absoluta y un reflejo de la fiel realidad y circunstancias de Colombia. No, no es así, pero tampoco se trata de eso. Un blog es un diario personal, realizado principalmente con base en opiniones, vivencias y percepciones personales y eso no se puede perder de vista. Y escribir para gustarle a todo el mundo, creo que sería una labor titánica.

En cuanto a su diseño y disposición gráfica, es un blog bastante atractivo, realizado profesionalmente y con un agradable estilo propio. Claro que tiene la fortuna de tener a su lado a un excelente profesional del diseño y desarrollo Web, como lo es mi buen amigo Mario Carvajal. Así que en este caso las flores van para él, no para ella. ¡Ni más faltaba que se iba a ganar Ewa indulgencias con padres nuestros ajenos! 🙂

Me alegra mucho que sus notas de blog -ojo, no bloc de notas- se hayan convertido tiempo después en lo que hoy día es Diario de café: notas del viaje por Colombia, su libro bilingüe que destapa desde su óptica muchos de nuestros lugares y muchas de nuestras simpáticas costumbres.

Para tí, Ewa, este pequeño homenaje y mi sincero cariño, amiga mía.